Estamos acostumbrados a una gran variedad de juegos de disparos en primera persona con mayor o menor presupuesto. La tendencia de las titánicas producciones evoluciona, cada vez más, hacia una experiencia multijugador atractiva, aniquilando la campaña individual. Tenemos ejemplos de sobra, sin ir más lejos el reciente y mediático Star Wars Battlefront (EA DICE, 2015) que apuesta por el online motivado por la demanda del grueso de los consumidores de FPS. Por otro lado, existe una pequeña resistencia que aún alberga propuestas personales y que nos aportan luz suficiente para creer que todavía nos esperan sorpresas y experiencias renovadas en el género.
Superhot (SUPERHOT, 2013) se mueve a sus anchas en el mundo de los First Person Shooter, cual David entre tanto Goliat, con una propuesta fresca en sus mecánicas de juego. El título es un proyecto independiente creado en la 7 days First Person Shooter Game Jam de 2013 por un reducido grupo polaco dirigido por Piotr Iwanickj. Gracias a las críticas positivas que recibió este pequeño experimento cuando lo alojaron en su web, el estudio se animó a financiar una versión más completa en Kickstarter, que consiguió sus metas en apenas 23 horas. Hoy, el proyecto se encuentra en la última fase de desarrollo y esperan lanzarlo a finales de año en Xbox One, PC, Mac y Linux.
Superhot apuesta por un diseño minimalista de tonos claros y monocromáticos, con enemigos cristalinos resaltados en rojo –algo que recuerda especialmente a Mirror’s Edge (EA DICE, 2008)– que estallan en pedazos con cada disparo. Nada más empezar, y sin tutoriales aburridos, Superhot te muestra la característica clave para entender la dinámica principal: el tiempo solo avanza si te mueves. Sin dilaciones, el título nos apremia para presionar los comandos de movimientos (w, a, s, d) para comprobar cómo su universo cobra vida cuando pasamos a la acción. Deberemos vencer a tantos enemigos como nos sea posible durante cinco niveles, pero con esta ventaja temporal que nos permite ver el recorrido de las balas que nos amenazan, algo así como un Neo dentro de Matrix (Hermanos Wachowski, 1999). Superhot te obliga a calcular cada paso para no caer abatido: un tiro, una muerte. No hay oportunidad para el error. Los escasos sonidos que nos acompañarán durante la acción siguen nuestro ritmo, creando un ambiente sonoro en el que el silbido de las balas y los efectos de frenado o aceleración del tiempo adquieren todo el protagonismo.
Superhot es un título de contrastes: recrea las escenas con elementos muy básicos, pero es capaz igualmente de mostrar en pantalla un gran espectáculo visual; la acción es el componente principal de sus mecánicas y, al contrario de lo que suele ser habitual, nuestro proceder deberá ser metódico y pausado. Lo mejor que se puede decir de este proyecto es que sigue manteniendo esa ventaja del tiempo: con más de dos años a sus espaldas y, sin embargo, igual de original.
JUÉGALO EN: Superhotgame
OBSERVACIONES:
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