¡Más de 16 millones! Esas son las reproducciones que ha conseguido hasta ahora Kung Fury en tan sólo tres semanas. Esto parece una prueba fehaciente de que, además de hacernos reír a carcajadas, admitámoslo, nos encantan los ochenta. Y es que las luces de neón azules y rosas, los Lamborghini Countach, la música electrónica o mismamente la Atari marcaron una generación irrepetible (y un poco hortera, todo sea dicho). Del mismo modo, pero ya en el sector de los videojuegos, el proyecto FarCry 3: Blood Dragon arrasó con su estilo a lo Soldado Universal (Roland Emmerich, 1992) derrochando carisma, chistes y clichés a partes iguales, y convirtiéndose en el título con el que, al menos un servidor, más se ha divertido en los últimos años.
En esta ocasión, y como si se tratase de un encaje perfecto con la época en la que David Hasselhoff y Kitt estaban en pleno apogeo, el estudio Megacom Games nos sorprende con Power Drive 2000, título indie de carreras arcade (en fase de desarrollo), con un estilo a camino entre la sencillez mecánica de los Ridge Racer (Namco, 1993) o Daytona USA (Sega, 1994) y la estética ochentera de películas como Tron (Steven Lisberger, 1982). Las carreras se desarrollan en circuitos vertiginosos, psicodélicos y oscuros que contrastan con las luminosidad que rodea los escenarios. A los mandos, parece que el turbo y el derrape son la marca imperante en tramos cortos ideados para dejar tranquilo el pedal de freno.
Además, el apartado artístico está muy bien acompañado por otro de sus puntos fuertes: una banda sonora con más de una veintena de temas electricos que tiran de sintetizador y que nos recuerdan inevitablemente a Kavinsky; que incluye composiciones de Ex-Machina, Starbound, Killstarr o MOXX, entre otros. En cierta manera, la propuesta parece similar a lo que ofrecían clásicos como Out Run (Sega, 1986), en el que, al estilo arcade, se sumaba un apartado gráfico y sonoro ideado para agradar a la vista y el oído.
Recientemente, Power Drive 2000 ha superado con éxito una campaña de financiación en Kickstarter, y desde la plataforma podéis acceder a una versión pre-Alpha del juego. Si bien no están carente de algunos fallos, os servirá para saciar vuestro mono ochentero hasta su salida prevista para mayo de 2016 en PC y Playstation 4.
Os dejamos con el tráiler: