Vivimos una etapa en la que la industria videolúdica aumenta su peso mediático y afianza así su integración y aceptación por parte de la sociedad no jugadora. Disciplinas culturales como el cine y la música coquetean con técnicas y características inherentes en los videojuegos. Un ejemplo son los títulos que fusionan “videoclips musicales” con mecánicas jugables, género alternativo e independiente en el que el videojuego se distorsiona hasta un punto que cuesta reconocerlo. Aquí, el protagonismo es para lo que vemos en pantalla: imágenes que se emparejan con la música, coprotagonista también de este género Music Video(game).
James Earl Cox III, creador de Nivearum (James Earl Cox III, 2016), se caracteriza por desarrollar obras que, sin necesidad de texto, son capaces de conectar con el jugador y atravesar «la cuarta pared» con atrevimiento. Si en Nivearum la soledad era el sentimiento predominante, en Temporality se muestra a un soldado corriendo hacia su destino en el campo de batalla. Durante la partida escuchamos de fondo Transitivity, tema de Julie Buchanan, la mejor excusa para el diseño de este título experimental que nos habla de la vida y la muerte. Se trata de una triste composición sinfónica a piano y con tintes electrónicos que simulan el movimiento hacia delante y hacia atrás del tiempo.
En Temporality solo utilizamos dos botones, A y D. Con A rebobinamos la acción y con D avanzamos hasta cruzarnos con el desenlace de nuestro protagonista. En el título de Earl Cox, la interacción se reduce al control de nuestros recuerdos, como si estuviésemos en el último segundo de nuestra vida. Todo lo que intentemos por evitar el trance será en vano, lo único que logramos es revivir algunos recuerdos: una carrera por el campo bajo la lluvia, un paseo cogido de la mano de su novia, una excursión por las montañas… todo bajo un diseño artístico pixelado, con una paleta de colores básica pero muy efectiva para cada etapa que representa.
Temporality es una tragedia programada y gamificada; es ese tipo de videojuego del que muchos dudarán si realmente merece esa calificación. Su discurso se vale de un cliché, tan típico como el de la muerte y la reverberación de las buenas experiencias que quedan en el camino. No obstante, ofrece una experiencia que ha recibido el reconocimiento de la crítica especializada, e incluso con una exposición en la XIX Japan Media Ars Festival, muestra que selecciona obras de diferentes ámbitos y que llaman la atención por su creatividad.
Posiblemente, el título de James Earl Cox III no destaque por una propuesta jugable y divertida y, sin embargo, no podemos negarle la influencia del videojuego a nivel artístico. Temporality asalta otra disciplina como la de la música (el videoclip) para ofrecer una peculiar inmersión y contar una historia que complemente a la ya de por sí completa (y compleja) experiencia que transmite su composición musical y su delicada fotografía.
JUÉGALO EN: Game Jolt
OBSERVACIONES:
– El título se puede jugar a pantalla completa y no hay publicidad que nos distraiga.
– Si tienes problemas para jugarlo en el navegador, como es habitual en Game Jolt, puedes descargarlo en un minuto.